FACHADAS VENTILADAS

Una Fachada Ventilada, es también un sistema de aislamiento por el exterior, pero en este caso su revestimiento de protección (formado por piezas cerámicas, de piedra, de composite, etc.), está separado de la fachada y del aislamiento térmico instalado, formando una cámara por donde circula el aire por simple convección. El sistema cuenta con una subestructura portante, estudiada de manera individual para cada edificio, por una ingeniería especializada.

VENTAJAS DEL SISTEMA...

> La principal ventaja es la reducción del consumo energético. Esto genera un retorno de la inversión realizada al rehabilitar el inmueble. 

> Mejora la sensación de confort en la vivienda. Las fachadas exteriores no están a una temperatura muy inferior a la del interior, por lo que se evita la sensación de estar perdiendo calor. 

> Se adapta a la envolvente del edificio por el exterior de la fachada, lo que facilita la corrección de todos los puentes térmicos. 

> Su función no es calentar, sino aislar, lo que hace que este sistema funcione tanto en invierno como en verano. 

> Se puede instalar en edificios con pocas molestias para los usuarios. Los propietarios pueden seguir disfrutando de sus viviendas durante la obra, y experimentar la evolución de las mejoras que ofrece el sistema.

> Mejora notablemente el aislamiento acústico. 

> Sirve como protección para la estructura del edificio contra agresiones externas (condiciones climatológicas adversas, polución, etc.).

> Se mejora la estética de la fachada rejuveneciendo su aspecto.